El Visual Kei es un “género musical” que comenzó en los últimos años de la década de los ochenta y que fue popular durante el "boom de laas bandas japonesas" (1988 – 1998). Cuando el Oshare Kei comenzó, consideraban a la mayoría de la escena Visual normalmente como “dark” en estilo y contenido de las letras de las canciones, ya que normalmente las bandas tocaban música al estilo metal.

En su vestimenta mezclan colores vivos, con colores oscuros. El estilo de la ropa se basa en colores que hacen contraste con el negro. Normalmente suelen usar muchos accesorios como gorros, moños, percings, y muchos más, para lograr siempre una apariencia que se deduce como "alegre", sobre todo si lo contrastamos con los otros géneros del Visual Kei. Estéticamente, son los que menos maquillaje usan dentro de los grupos del Visual Kei. Su estética Visual es alegre, muy colorida y juvenil, pero siempre con el color negro u oscuro presente frente al contraste de los colores vivos, recordando a la moda callejera mezclada con colores vistosos. Suelen llevar bastantes adornos y accesorios, e incluso a veces algún muñequito colgando. Suele ser típico alguna sombra de ojos colorida y vistosa en los párpados, y pegatinas brillantes alrededor de los ojos, pero todo depende del estilo de cada uno, ya que hay mucha variedad. A veces algunos pueden recordar a los Decora, pero realmente no tienen que ver.

Este tipo de bandas pertenecen a un tipo de música alegre, que suele incorporar el estilo punk, mezclado con otros estilos (como pop y rock) dependiendo del grupo, dado que cada uno tiene su estilo propio y único, basándose en su definición y forma de expresar esa alegría. El grupo que comenzó con el oshare, mostrando así un punto de vista distinto dentro del Visual Kei, fue el grupo Baroque, en el 2001, quienes ya se separaron. Musicalmente, su distinción es lo ya nombrado, las letras alegres y optimistas, algo que forma parte de la filosofía oshare, y que supuso un impacto frente a los temas de las demás subcategorías del Visual Kei, las cuales no acostumbran a ser optimistas ni felices en sus letras. Los gritos propios del visual, y los solos de guitarra son también parte del oshare, como subgénero del visual que es.